#ElPerúQueQueremos

no se repitió el partido de salvador. a pesar de pelear una barbaridad, caímos 0-2.

Pinchazo con motivo

Brasil nos ganó en el Nacional 0-2 en base a su dominio, al que no pudimos hacerle frente. Muy a pesar de los aciertos de la Selección, errores puntuales nos dejaron sin puntos, pero aún vivos.  

Publicado: 2016-11-16

Es triste comentar una derrota de la selección peruana. Hoy es de esas ocasiones en las que sucede. 

El partido que se jugó en el Estadio Nacional era, en la previa, por decir lo menos, particular. ¿En qué sentido? Después de la victoria en Asunción, se había generado un halo de extrañeza con respecto a este partido, es decir, sí, enfrentábamos al Brasil líder con 5 victorias en 5 partidos desde que asumió Tite, pero daba igual. La gente se la creyó que podíamos ganar, más que otras veces. La expectativa (que siempre está) era mayor a la de otros partidos y no la acostumbrada. Hasta el humo de la prensa no era el mismo (!).

Con respecto al partido de Asunción, todos pensábamos que frente al embalado Brasil íbamos a guardar recaudo, a jugar con precaución, al estudio. Todos menos Ricardo Gareca y su comando técnico: al líder le salimos a encimarlo, a buscar la ventaja desde el minuto 1 (#ElPaloDeCarrillo). Cuando Brasil se asentó en el campo después del minisusto inicial, ahí comenzó la segunda fase del partido, en el que Brasil (vestido de azul) manejaba el balón a sus anchas frente a una selección peruana que mantuvo el orden todo el primer tiempo, aguantando cada embate visitante, sufriendo varias aproximaciones al arco de Gallese. No había duda: Brasil dominaba y Perú resistía. Final del primer tiempo. 0-0.

Segundo tiempo: Perú tuvo otra clara al inicio. Parecía repetirse la historia de los primeros 45'. Salvo un detalle: los 11 que vestían de azul en el gramado del Nacional no salieron del vestuario a manejar la pelota; salieron del vestuario a hacer eso, a presionar y a ser mucho más directos e incisivos. En ello, 5 peruanos rodearon a Coutinho, le quitaron el balón pero #LaPiernaDeAquino generó un rebote que aprovechó Gabriel Jesús. 0-1. Directo en la esperanza. 

Sin embargo, tuvimos una mucho más clara que la anterior: centro, carambola en área brasileña y #ElCabezazoDeRamos no ingresó, sin exagerar, por dos centímetros. Ingresaron Ruidíaz, Sánchez y Advíncula. En ese momento, cuando comenzábamos a hacer andar la máquina para intentar igualar, Renato Augusto convirtió a pase de Neymar (que un tiro al travesaño tuvo después). 0-2. Directo en las ganas. Sin embargo, se siguió peleando, se siguió intentando descontar. No alcanzó. 

Lo último da para recalcar que hubo "algo" extraño alrededor de este partido: perdimos, pero los jugadores se fueron aplaudidos, a pesar de perder.

Siempre es triste comentar una derrota de la selección peruana. Pero es la primera vez que nos vamos derrotados, pero nos vamos tranquilos. La tabla hoy no interesa. Más que tres puntos en dos fechas hemos ganado. 


Escrito por

Kenneth Millones

Dedicado a la selección, torneo local y a brindar una mirada a la sociedad a través del deporte más querido -y sufrido- por los peruanos.


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